Hace diez días este blog cumplió
nada menos que siete años.
Pese a que no me he prodigado
mucho en él, lo cierto es que gota a gota se hace un mar.
Cuando cumplió cinco años ya
comenté que, olvidándome del valor relativo del número de entradas, ya parecía
una cantidad suficiente de las mismas para desnudar una parte, al menos, de mi
naturaleza.
Pues bien, llevaba un tiempo dándole
vueltas a la idea de ir un paso más allá, y al final me he decidido a darle
cuerpo físico a gran parte de este blog.
Si bien no tengo nada contra el
formato digital, en cualquiera de sus opciones, siempre he preferido añadir el
sentido del tacto a la lectura; cuando no había más opción y cuando ya la
había. Soy algo antiguo en eso, aunque quede mejor decir romántico.
Es indudable que los libros
físicos tiene los días contados, como los tenemos nosotros, pero al contrario
que con otras cosas (DVD's por ejemplo), me resisto de momento a prescindir de
ellos. Mi videoteca (en sentido amplio, pues incluyo las cintas de video, que
pronto serán tan extrañas como los teléfonos de disco, y los DVD) está hace
tiempo en fase terminal por culpa de los discos duros, pero mi biblioteca me
sobrevivirá sin duda.
Bueno, la cuestión es que, como
decía, he convertido gran parte de este blog en un libro.
Hoy en día escribir sigue
teniendo el mismo mérito relativo que antaño, pero las nuevas tecnologías, y
los nuevos conceptos empresariales, han hecho que editar y publicar no sea ya
una odisea, ni exija una excelencia siempre subjetiva o una red de contactos
adecuada. Ni siquiera es necesario que se sigan los patrones de beneficio,
tendencia u oportunismo.
Con todo esto quiero decir que no
lo considero una gran hazaña y que lo único que he buscado es darle
continuidad, a la ya antigua usanza de tinta sobre papel, a lo que con el paso
de los años se ha convertido en la finalidad de este blog.
Es decir, que mis humildes
mezclas de palabras no se pierdan rápidamente en el tiempo y puedan servir de
legado a mis descendientes, con mayor información, a mi juicio, que un puñado
de fotografías, de enseres o de recuerdos transmitidos.
Dejando clara esta cuestión, y no
sabiendo cómo no parecer un vendedor al añadir los enlaces para su obtención,
si que diré que en el libro no aparece mucho más de lo que se puede leer aquí,
si bien está más ordenado y estructurado, así que es razonable no comprarlo.
No deja de ser curioso que, con todo
lo que he escrito a lo largo de mi vida, me haya decidido a publicar mi primer
libro ayudándome de las entradas de este blog pero, por algún motivo, me ha
parecido lo más acertado.
También puede resultar curioso
que después de todo lo que he dicho sobre el romanticismo del papel impreso, el
libro en cuestión también se publique en formato ebook pero, si algo tengo
claro, es que lo que a una persona le gusta, o le parece más adecuado, no tiene
que valer para los demás. Antiguo, pero de mente abierta.
Aunque en breve estará disponible
en más plataformas y formatos, e incluso bajo pedido en librerías físicas, dejo
aquí el enlace para Amazon España, en donde se puede encontrar tanto en formato
papel como en digital (Kindle).
Buenas tardes desde Arcoíris.