Tristeza derramada que ahogas mi
razón y poco ayudas a mi corazón,
Infantil inconsciencia que
cruelmente me dominas sin apenas resistencia...
Mi mente abstrusa solo ansía la bonanza de sentir vuestra lontananza,
Dejadme yacer sosegado mientras mi
tiempo se muestre obnubilado.
Buenas tardes desde Arcoíris.